lunes, 21 de noviembre de 2011

La Luz en las "MIRADAS", fotografías de Aurora Espiga en nuestro Centro.




Aurora Espiga  expone su obra fotográfica en el Centro Ana Mejía Feng Shui.

A partir del 24 de noviembre. Inauguración 20H.
C/ Andrés Mellado, 18 -28015 Madrid
centroanamejiafengshui@gmail.com

“Todos sentimos algo cuando nos miran, la mirada dice y la mirada nos hace sentir cosas”

La mirada de una persona es una fuente de mensajes. Nuestros ojos casi siempre dicen más que las palabras. El problema está en que la mayoría de las veces sólo escuchamos y no miramos. Aurora Espiga es fotógrafa y como es lógico sabe mirar y captar en sus retratos las palabras mudas de sus personajes. Aurora es una viajera que no hace fotos de viajes; no es una profesional de la fotografía  pero tampoco es “amateur”. Como ella señala, la diferencia está en dejar de hacer fotos a todo lo que pasa por los ojos y tomar sólo aquellas imágenes que se adentran en nosotros, que  son emoción. Aurora  captura el instante de una mirada, la pregunta, el silencio o la emotividad de niños y también de los más mayores. Su proyecto fotográfico es ambicioso, quiere mostrar con sus “Miradas” el paso del tiempo; primero el futuro con las miradas de jóvenes con los que se ha encontrado en sus viajes, temática de esta exposición y más adelante la mirada de los ancianos. En esta entrevista nos habla de sus fotografías y sobre todo de su aprendizaje, de la gran experiencia humana que supone captar la mirada de de los niños  que protagonizan la exposición.

¿Qué fotos podremos ver en la exposición? ¿Pueden agruparse bajo un título, bajo una motivación?
Es sencillamente una serie de imágenes en las que he pretendido que la mirada sea protagonista. Originalmente son tomas en color. Pero me gusta el blanco y negro ya que para este tipo de “imágenes”  me parece el mejor lenguaje, así que luego las trabajo. Creo que el color puede llegar a distraer. El blanco y negro lo deja en lo que es en realidad “Miradas”.

 Tú no te dedicas profesionalmente a la fotografía, sin embargo tampoco eres una simple aficionada porque tus fotos no son paisajísticas o de viajes, tienen  componentes emotivos, humanos; es un trabajo creativo. ¿Cómo es el proceso interior en dónde se pasa de fotógrafa amateur a creadora?
Bueno, mi trabajo quiere ser creativo pero creadora… no siento que sea para tanto. Creo que  la fotografía  pasa a ser “algo más” en el momento en que dejas de hacer fotografías a TODO y descubres “aquello” que realmente te importa. Vamos cuando dejas de “disparar” fotos y comienzas a “tomar” imágenes. Encuentras “tus motivos” y  con ellos  regresas de tu viaje.

 ¿Por qué optas por este tipo de fotografía, por el protagonismo humano? ¿Qué te motivó?
Soy curiosa. Mirar a través del objetivo, partiendo del respeto absoluto hacia la persona que tienes delante, tiene como resultado, en ocasiones,  atrapar un momento  cargado de vida y detener o parar el tiempo y convertirlo en una imagen. El ser humano, a pesar del ser humano, es lo mejor que tenemos entre nosotros.

 Tienes en mente el proyecto de captar con el retrato, con la mirada, el transcurso del tiempo. En esta exposición vemos, en alguna medida el futuro en los retratos de niños y jóvenes, y quieres realizar retratos del pasado a partir de personas mayores.
En ello estoy… empezando. La mirada cambia y cambia mucho. La mirada dice y la mirada nos hace sentir cosas, todos sentimos “algo” cuando nos miran. Ese algo que uno siente es lo que me gustaría ser capaz de transmitir con la imagen, con mis fotos. Y sí en este arranque he empezado con la mirada del futuro, con la mirada de niños.

 La obra que expones en el Centro Ana Mejía es en blanco y negro. La mayoría de los creadores fotográficos trabajan en blanco y negro. Has mencionado en alguna ocasión  que la mirada de esos niños es en blanco y negro, ¿puedes explicarnos que quieres decir, cuál es la sensación que tienes al mirar a esos personajes?
Tengo sensación de vida. Pero sobre todo  yo encuentro en ellos verdad. Es una mirada que aún no ha sido contaminada. De sobra sé que hay infancias dramáticas e imágenes de ellas, todos las tenemos en la memoria, aparecen habitualmente en los medios de comunicación. Pero el lado de luz existe. Esa luz, esa verdad es lo que siento, lo que me transmiten.


Tu trabajo se centra en personas, protagonistas que viven en India u otros países no occidentales. ¿Qué te emociona de esas zonas del mundo? 

Cuando uno  llega, aunque la realidad sea dura y muy complicada que lo es,  siente la vida latir a su alrededor. Es una sensación muy intensa, tan intensa como la realidad que percibes.

¿Qué aprendes de las personas que fotografías?
Me impresiona la dignidad que muestran.

¿Tienes dificultad para situar a esos personajes ante el objetivo?
¿Dificultad? Cuando los miras con la cámara ellos son conscientes del momento. En el instante que siento el menor atisbo de rechazo o siento la sensación de que “molesto” bajo la cámara DE INMEDIATO. Odio al “hombre blanco” provisto de cámara que sin respeto a nada ni a nadie que irrumpe de manera brusca en la vida de las personas, solo por el mero hecho de ser blanco y turista; y en este caso  el orden  sí que importa

¿Tus fotos quieren transmitir una lectura “humanística” de tu visión del mundo?

Uf, no diría tanto. Me conformo con transmitir la sensación de paz que yo siento cuando las miro.

 Creo que además del retrato te gusta mucho la foto-arquitectura.
En efecto. Y me gusta mucho. Me gusta en su totalidad, en su detalle. Me gusta la luz dentro de los edificios… en realidad me gusta la foto de arquitectura porque me gusta mucho la arquitectura como disciplina. Es la única modalidad de arte “que te envuelve” y en la cual puedes “penetrar” y sin que te vean…. tocar. Y si tocas… sientes…. Pero me gusta mucho igualmente el agua, las flores…

¿Qué fotógrafos admiras?
Un maestro, el mejor: Jose Ortiz Echague. Sus imágenes son auténticas obras de arte. Indispensable: Ansel  Adams, es el  blanco y negro lleno de color y los paisajes que jamás sabré hacer. Impresionante: Robert Mapplethorpe. Sus imágenes de “piel”, sus retratos y sus fotografías de flores son eso, impresionantes. Para mí otro gran fotógrafo es Sebastiao Salgado. Sus series o sus trabajos sobre todos y cada uno de los temas que ha tocado son sobrecogedoras. Y Cristina García Rodero: instantes llenos de vida…. aunque una foto a una piedra. Y podría seguir… pero con estos cuatro ya me vale.





  (fotografía de la futura serie dedicada al "Pasado")

1 comentario:

  1. sencillamente "maravillosas",profundas, y elocuentes.
    Felcidades Aurora!. me encantan, es un trabajo lleno de sensibilidad.

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